Dos Días, Una Noche / Desechos y Esperanza

Hasta que finalmente contamos con dos buenos dramas:

Dos Días, Una Noche (Two Days, One Night)

Marion Cotillard si se merecía la nominación por este drama independiente que pese a la sencillez de su trama, se torna lo bastante compleja conforme nos adentramos en la situación social-laboral vinculada con la humilde vida de una trabajadora de la cual pudiera tratarse de cualquiera. Cotillard es sobresaliente como era de esperarse aunque en esta ocasión, hace a un lado su belleza adoptando una actitud de amargura y pesimismo. En cuestión de segundos nos conquista con su interpretación de Sandra Bya. Desde la primera impresión, nos conmueve y más cuando se cuestiona la naturaleza humana entre la moral y el dinero. Asimismo Fabrizio Rongione contribuye con fortaleza y otros actores de reparto entregan escenas poderosas pese a tratarse de apariciones. Hoy en día, es un claro ejemplo de lo que está sucediendo en las organizaciones y como estudio social, nos servirá para analizar y generar a una opinión autocrítica sobre nuestra situación actual y laboral.

Calificación: 4 de 5 estrellas

Desechos y Esperanza (Trash)

Basada en la novela de Andy Mulligan, el director Stephen Daldry nos sorprende con otra historia en sintonía a la calidad narrativa de Billy Elliot y Tan Fuerte y Tan Cerca. No cabe duda que Daldry en un experto cuando se trata de extraer el esfuerzo sentimental en sus actores niños ya que los veteranos Rooney Mara y Martin Sheen terminan siendo un respaldo. De aquí en fuera, el peso recae en el trío de niños quienes se toman como objetivo hacer lo correcto aunque sus vidas dependan de ello. Obviamente esta adaptación no es para cualquiera porque a pesar de que sus eventos sean ficticios, no difieren tanto de la realidad. Indudablemente nos ponen a meditar sobre ciertas circuntancias de la vida y el alcance de la corrupción. Sin embargo, no todo es seriedad, también se cuenta con un par de secuencias de acción, humor, fe y mucho suspenso para mantenerte ansioso porque el peligro siempre se encuentra ampliándose hasta ese inesperado final.  

Calificación: 4 de 5 estrellas