Basada en la travesía real de Tami Oldham
y Richard Sharp, quienes a los pocos meses de conocerse deciden embarcarse en
el yate Hazana sólo para verse envueltos por el huracán Raymund. Quedando a
duras penas a flote, deberán hacer hasta lo imposible por buscar la forma de
sobrevivir.
Baltasar Kormákur es reconocido por haber
dirigido Everest por lo que es de
esperarse cierto sentimentalismo conforme se relata este suceso. Hace un
excelente trabajo en mantenerte en el suspenso que hasta haber empleado
secuencias en el pasado conforme se procedía en el presente, resultó en una
nota favorable entorno a ese giro inesperado en el tercer acto.
Se podría decir que sales con el corazón
roto y con mucha razón gracias a
Shailene Woodley quien se inspira en Bajo
La Misma Estrella para emular esa fuerte interpretación. En su rol de Tami,
no sólo es carismática sino lleva a cabo las maniobras con una intrigante
esencia de sobrevivencia porque su ejecución de por sí demandante, cuenta con
una profundidad expresiva.
Yo
Antes que Tú podría ser la referencia principal para Sam Claiflin a pesar
de aparecer en mega-producciones como Piratas del Caribe, Blanca Nieves y Los
Juegos del Hambre. De nueva cuenta se mantiene lejos de la acción y con buena
razón considerando como su contribución impacta a la edición por tornarse en el
corazón de la trama.
Quizás el punto negativo es que ambos
actores sigan en los mismos roles previamente
vistos; en sí no es de darle tanta importancia porque su química
compartida es lo que hace que nos enganchemos hasta el grado de desear que
ambos sobrevivan porque es imposible no contagiarse de las emociones expresadas.
Aquella desesperación e impotencia fueron alcanzadas por los dos.
El guión sirve de guía, cumple con establecernos
a los personajes aunque aquí el peso fueron los efectos especiales y la
cinematografía porque la secuencia del huracán es devastadora y más por su
significado cerca del final. Los encuadres brillaron gracias al trabajo de
edición empleado que en conclusión, terminó por agradarme más de lo que hubiese
anticipado.
Si crees que por algún momento te vas a
aburrir, en lo absoluto. Quisiera decir que sus 90 minutos se te pasan volando
pero estaría mintiendo porque tanto el sufrimiento como la tensión del momento
te hacen refrenar el ritmo lo cual ocasiona que sientas ese hueco en el
estomago al desatarse los créditos.
Si no tienes nada que hacer este fin de
semana, yo la recomendaría pero vayas o no al cine, eventualmente tendrás que
verla por lo que te hará sentir y pensar. En pocas palabras, si te gustó La Montaña Entre Nosotros, entonces esta
sí podría gustarte.
Calificación: 4 de 5 estrellas
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