Un drama romántico en la tradición narrativa de su autor Nicholas
Sparks. Siguiendo la estructura de Lo Mejor de Mí bajo el estilo fílmico de
Diario de Una Pasión, la trama se
centra en dos historias de amor de distintos tiempos cuya conexión sucede a
través de una docena de cartas.
Posteriormente de un año de recuperación, el vaquero Luke Collins regresa
al rodeo encontrándose con Sophia Danko, una estudiante a punto de irse a Nueva
York. Durante este complicado romance, descubren a Ira Levinson quien les ofrece
una noción más amplia de lo que significa hacer sacrificios en el nombre del
amor.
Manteniendo el porte de su padre, Scott Eastwood asume el protagonismo
con el mismo carisma y elegancia. Tampoco será tan reconocido como Britt Robertson
pero cabe señalar que ambos comparten una agradable química en pantalla. Ya sea
juntos o por separados, se desenvuelven con tanta naturalidad e inocencia que
de inmediato nos enganchan.
Lo mismo podría decirse de Jack Huston y Oona Chaplin quienes se
posicionan en el mismo nivel de Eastwood y Robertson. Aunque en este caso, la
seriedad de Huston le da ese peso emocional complementándose a su vez con la profunda
conciencia promovida por la versión mayor del personaje, interpretado por el maravilloso
Alan Alda (El Aviador).
El guión de Craig Bolotin mantiene un buen ritmo de los distintos contextos;
en ningún momento se pierde la emoción, al contrario, terminan y empiezan
justamente en los puntos esenciales manteniendo esa retroalimentación entre
ambas parejas. Embellece las relaciones, las pone a prueba y las fundamenta con situaciones no tan
distantes de cualquier realidad.
Tampoco se siente melodramática, tanto jóvenes como adultos pueden
disfrutarla y aprender bastante dada la comparación directa entre ambas
culturas, especialmente por la implementación de los valores y el retorno de la
caballerosidad. Asimismo no sólo el respeto
sino la absoluta atención hacía nuestros ancianos porque todavía tienen mucho
que ofrecernos.
Dicho lo anterior, la dirección de George Tillman Jr. es bastante
tierna, simpática y en sus momentos nos sorprende con suspenso, ya que la
mayoría que ha leído o visto las producciones de Sparks, sabe que la tragedia
siempre ronda cerca. Por esa ausencia de predictibilidad, se torna un atractivo
intrigante para ver.
No estará a la altura de Diario
de Una Pasión, pero podría señalarse que El Viaje Más Largo yace adelante de Un Lugar Secreto y Querido
John. Visualmente nos hipnotiza con su efecto rural y nos sumerge en la
peligrosa situación en la que vive un jinete de rodeo; pero más que todo, nos
obsequia una guía para valorar lo poco que tenemos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario