domingo, 10 de agosto de 2025

Mi Año En Oxford: ¿Tolerable y Disfrutable?


 Es muy curioso como tienden a ser duros con esta clase de películas, como si quisieran que fueran mucho más de lo que sus avances claramente indican. En ese caso, estaría mejor Vidas Pasadas o Los Juegos del Destino, por lo que ni al caso ya que en mi humilde punto de vista, estamos ante una comedia romántica con tintes dramáticos que cumple su propósito de tocarnos el corazón sin tener que quebrarse la cabeza con dramas o desarrollos complejos de los protagonistas, que si los tiene más no como uno esperaría.


Por tanto, estamos hablando de la clásica película dominguera, que al final termina dándonos una lección por más simple e ingenua que sea. Que no lo es del todo viendo como Anna aprende a dejarse llevar por los momentos que le ofrece la vida, tal como comer, divertirse, socializar y correr el riesgo de enamorarse, aunque no haya futuro para los dos.

De eso va la travesía de Anna De La Vega, una americana de raíces hispanas con su futuro asegurado en una empresa de alto prestigio gracias a su título en la Universidad de Cornell. No obstante, decide posponerlo para viajar a Inglaterra y cursar una maestría en Lengua y Literatura Inglesas con una especialidad en poesía victoriana en nada menos que en Oxford.

Lo que ella no anticipa es que pese a estar decidida a ir y venir para cumplir con su plan y listado de objetivos, termina enamorándose de su maestro de clase de quien en un principio le disgusta hasta comenzar una relación informal que porun dejarse llevar de emociones se torna lo bastante formal hasta grado de involucrar a la familia y a los amigos ante una terrible verdad que los marcará a los dos en diferentes maneras.

Espero no haber revelado de más, aunque no sería nada nuevo si fuiste de aquellos que vio el avance haciendo hincapié en que ya ni se molestan en medio ocultar ciertos giros. Además, viniendo de los responsables detrás de Bajo La Misma Estrella, con eso está más que dicho de qué va la trama y aun así, me resultó lo bastante encantadora de ver gracias a Sofía Carson y Corey Mylchreest.

Referidos como los alumnos de Netflix, en especial Sofía Carson tras los éxitos de Siente El Ritmo, Equipaje de Mano y Mi Lista de los Deseos, siendo esta última una de mis favoritas por su enfoque consciente e inspiracional. Podría decirse que los guionistas le bajaron un par de rayitas para tan siquiera disfrutar la mitad de esta función, dejándole todo el peso a los protagonista que en su defensa se desenvuelven con naturalidad que las risas brotan bajo esa tierna y simpática atmósfera que tanto ellos como el director logran esparcir en este relato de 110 minutos.

En los zapatos de Anna, qué puedo decir de Sofía excepto que su carisma y modismos nos hacen imposible no quitarle la vista de encima conforme nos hace reír y llorar ya sea en estado de buenas o malas. Son de esas chicas quejumbrosas que nos alegran el día y cuyo espíritu de justicia y honestidad la vuelven en una actriz auténtica y más por siempre lucir sus raíces latinas.

Sin importar lo que se demande en los típicos escenarios, Sofía hace una buena mancuerna con Corey, reconocido por su reciente papel del Rey en La Reina Carlota: Una Historia de los Bridgerton. El típico inglés, en momentos engreído y en otros un caballero con un gusto inusual y un secreto que podrías ver tan claro como el agua, pero que de igual forma haces caso omiso por lo genial que son los dos juntos por sabe jugar con sus respectivos roles.

El veterano Dougray Scott, como el padre, es quien le inyecta de tensión a esta comedia romántica, dándole ese giro de Drama Familiar disfuncional en donde la situación se pone seria e incómoda, sirviendo como un riesgo para desequilibrar y poner a prueba esta relación tan frágil porque en cualquier momento está por quebrarse. Sin olvidarnos del resto del elenco, quienes se someten a cualquier ambiente dictaminado por Carson y Mylchreest. A pesar su empiezo simplista, todos terminan por llevarlo al siguiente nivel ya que los últimos cinco minutos son agridulces y a su vez brutales.

Aparte de que nos contagian de la poesía y mediante esta cultura logran hacer hincapié en su importancia para nuestra formación personal como profesional. No se diga de la cinematografía, el director Iain Morris aprovecha los espacios tanto internos como externos para enriquecer los escenarios dándole una vibra de una moderna Orgullo y Prejuicio. Hasta la mención de La Materia Oscura quedó perfecta por coincidir en la personalidad de Anna y mi reciente análisis sobre el primer libro, la primera película y la Primera Temporada. Así que estoy en el momento y en el tiempo indicado.

Entonces… Mi Año En Oxford es exactamente como su título lo dice, es sobre el año en que Anna decidió cursar en Oxford y como su plan de vida se vio alterado al enamorarse de algo que no podía controlar y he ahí la manera de cómo proceder sabiendo que sólo le deparaba dolor, pero es parte de la vida correr toda clase de riesgos y nunca quedarse con las ganas de hacer las cosas porque no hay peor enemigo que la posibilidad de arrepentirse de no haber seguido tu corazón aunque tuvieras todo por perder.

Si eres seguidor de Sofía, y has visto todas sus películas en Netflix, ya sabes que esperar y seguramente la vas a encontrar igual de disfrutable, pero si esperas algo profundo y complejo, me temo que sólo encontrarás sufrimiento superficial, por lo que no depende tanto de mí sino de ustedes y el humor en que se encuentren ya sea para tolerarla o disfrutarla.

P.D.

No sé ustedes, pero me quedé con unas ganas de probar una de esas tortas de kebab tras verlos comerse este monstruoso y caótico platillo de cocina local cuyo encuentro sirve para profundizar en sus sentimientos, hacernos reflexionar sobre la vida misma y asimilar la tragedia que se avecina para todos los involucrados. Sin duda, esta escena es de mis favoritas.


Esa y las siguientes frases:

"I Thought That I Would Set The Tone By Offering You A Bribe. It’s A Massive Cake."

“Do You Think That Things Are Only Meaningful If They Last Forever?”

“Poetry Can Be Taught. But Really, It Should Be Lived. Let It In And Allow It To Change Your Life.”

“You Should Never Regret The Things You Do. You Should Only Regret The Things You Don’t Do.”

sábado, 9 de agosto de 2025

Reinterpretando Obi-Wan Kenobi


Después del reestreno de #StarWars #LaVenganzadelosSith, me decidí por continuar con la rivalidad entre Anakin y Obi-Wan en la primera y "única" miniserie de #ObiWanKenobi, y he aquí lo que pienso después de haberse estrenado hace 3 años.

Milagro en la Celda 7: Una Travesía Que Te Atraviesa!

Esta nota participa en el Desafío Peliplat Agosto 2025 en el siguiente link: 
https://www.peliplat.com/es/article/10073142/miracle-in-cell-7-a-cinematic-experience-that-goes-through-you

En cuanto descubrí que uno de los desafíos consistía en hablar de películas foráneas que trascendieron en el mundo sin importar que fuesen habladas en otro idioma ajeno al nuestro, de inmediato me vino a la mente el drama turco titulado Milagro en la Celda 7, dándome así la excusa perfecta para no sólo volver a verla sino promoverla mediante uno de mis escritos y así conseguir que quienes no la hayan visto, tengan la oportunidad de hasta compartir la maravillosa experiencia emocional por la que uno atraviesa desde el primer minuto y hasta el último.    

La primera vez que me enteré de esta readaptación, dado que está inspirada en la comedia dramática de Corea del Sur de 2013, fue a un par de meses de haberse anunciado la cuarentena a causa del Covid. Siempre me gusta hacer hincapié en la importancia de reconocer esta fase por más que el mundo del entretenimiento lo haya omitido, lo importante a destacar es que somos sobrevivientes y de qué nos costó duró ante los sacrificios que tuvimos que hacer y no siga de aquellos a los que tuvimos que soltar en el camino. 

No cabe duda que eran tiempos confusos en donde no sabíamos que iba a pasar con nosotros y con el mundo. Al menos las plataformas de streaming recurrieron a títulos internacionales para distraernos y gracias a esta alternativa, me encontré con este tesoro que, en su duración de 132 minutos, me brindó ese desahogo que tanto mi familia como yo necesitábamos en ese momento. Y no sólo eso, sino me hizo volver a creer en la humanidad por su mensaje de amor mostrado en su estado más puro.

Recuerdo que sólo me tomó medio minuto para detener el avance e inmediatamente reproducirla. De por sí había escuchado maravillas en las redes sociales a los pocos días de haberse vuelto una gran sensación en Netflix. Confieso que no soy muy de ver películas habladas en otros idiomas, y menos tratándose de una producción filmada en Turquía, todavía aceptó las producciones españolas por cierta familiarización en su cultura, historia e idioma.

De Turquía nada sabía y no era tanto mi interés saberlo, aún así, sentí el llamado y vaya que no se equivocaban en lo absoluto al referírsele como una montaña rusa de emociones porque después de La Pasión de Cristo, nunca había llorado tanto, mucho menos desde el primer acto tras estar haciendo pucheros por la conmovedora e inocente caracterización de Aras Bulut İynemli como Memo, un padre con problemas mentales que es acusado de asesinato.

La trama inicia en el año 2004, en donde podemos ubicar a una hermosa futura novia cuyo rostro se conmueve al escuchar entre las noticias de que la pena de muerte ha sido abolida en Turquía. A través de la reliquia que sostiene entre sus manos, somos transportados a una delicada vivencia que tuvo con su padre cuando tan sólo era una niña, compartiendo la misma mentalidad por así ponerlo, respetuosamente hablando.

La narrativa se desenvuelve en tres actos en donde el primero nos coloca en medio de esta hermosa y divertida relación entre padre e hija, supervisada principalmente por la Abuela. La única de esa casa y del pueblo que se preocupa por su yerno y le da la fuerza necesaria para seguir adelante dado el constante abuso que recibe de las personas al referírsele como el loco o retrasado del pueblo.

Habiendo experimentado trastornos del habla durante mi niñez, no pude evitar sentirme identificado con el bullying que sufría Memo, lamento decir que me trajo algunos malos recuerdos ya que los niños suelen ser muy crueles, mientras que psicológicamente resulta dañino la presión de los adultos al forzarte a “pronunciar correctamente” o referirse a ellos mediante insultantes adjetivos calificativos, lo cual no debería ser el caso porque nadie, absolutamente nadie debería ser definido ni tratado por su trastorno.

Nuestra personalidad va mucho más allá que nuestra capacidad física o expresiva, somos seres humanos que sentimos infinidad de sentimientos y a travesamos por diferentes fases ya sea solos o en compañía. Y gracias al protagonismo de Memo y compañía, esta película cumple con esa necesidad de mostrarnos lo que verdaderamente significa ser humano y la constante vulnerabilidad en la que se encuentran aquellos que no pueden defenderse.

Hay un escena en donde tras ser golpeado por un Coronel, la Abuela consola a su hijo Memo diciéndole que nunca se sienta menos porque es mucho más de la suma de todos los insultos, a lo cual Memo ni le pasa por su cabeza, ya que a él sólo le preocupa la felicidad de su hija Ova y verla triste por haber presenciado su golpiza le produce un temor de nunca volverla a ver sonreir a lo que su abuela le dice, que no se preocupe porque volverá a sonreír aunque no por las circunstancias deseadas porque esto es tan sólo la antesala del horror que se avecina para Memo y su hermosa familia. 

Sí de por sí los gestos y el comportamiento corporal de Aras te mantenían intrigado, ahora sumándole la inocencia en la que se desenvuelve Nisa Aksongur como Ova resulta devastador de experimentar porque su relación es autentica y una garantía emocional. La mirada de Ova te llega directo al corazón, el amor es evidente hacía su padre y mutuo. Existe un diálogo en donde la Maestra de Ova declara que siente envidia de la forma tan pasional en la que padre e hija se abrazan. Confiesa que, a pesar de ser un buen padre, lamenta que nunca lo haya podido abrazar como la pequeña Ova lo hace lo cual me hizo darles un fuerte abrazo a mis propios padres porque este gesto de amor es tan satisfactorio y siendo lo mejor que no tiene costo alguno.

Nadie está exento de la muerte, en cualquier momento nos podemos volver ángeles como sucede con la esposa de Memo y la Abuela de Ova, que no pudieron seguir cuando más eran necesitadas porque como lo comenté al principio, las fuerzas del mal hacen uso de la fuerza militar corrompiendo a un Teniente Coronel quien fija todo su poder para hacer un claro ejemplo de Memo, el presunto culpable de la muerte de su hijo, y destinarlo a la horca.

Es una travesía cinematográfica tan desgarradora de experimentar por la brutalidad en la que es presenciado Memo, incluso desde su injusta detención hasta pasar por tremendas palizas por parte de los soldados y de sus compañeros de celda en donde conforme los van conociendo, éste con su inocencia e infinita bondad calienta sus corazones sacando ese lado humano del cual se había olvidado de que lo tenían.

En un giro de eventos, la Celda 7 se convierte en una comunidad de personas que hacen conciencia de sus pecados y emprenden un camino hacía la redención al no sólo preocuparse por Memo sino por ayudarlo a reencontrarse con su hija y en consecuencia tratar de conseguirle su libertad a expensas de la suya. Entonces, mientras que la maldad parece estar en control, el bien poco a poco va escalando hasta el grado que la fe y la esperanza se convierten en una realidad posible a la cual debemos de siempre aferrarnos porque ese impulso es lo que nos hace ver lo hermosos que podemos llegar a ser cuando se trata de dar y recibir amor.

En este mundo no estamos exentos del mal, por lo que no podemos dejar que el odio y los prejuicios nos dominen por algo que está fuera de nuestra comprensión. Siempre debemos dar el beneficio de la duda, no juzgar y verdaderamente mirar a nuestro prójimo por lo que es y no por lo que queremos que sea. Esa proyección de uno mismo sí que distorsionan nuestra realidad, echándole más leña al fuego por así decirlo porque somos capaces de eso y de más, es lo que somos, lo que llevamos dentro, luz y oscuridad y depende de sólo nosotros decidir cuál de estas queremos que prevalezca sobre la otra.

Por tanto, Milagro en la Celda 7 es un claro ejemplo de cómo nosotros mismos tenemos la capacidad de hacer un cambio en nosotros y de cambiar a otros a través de nosotros. Sin importar que las palabras estén otro idioma, el sentimiento es tan claro en cada escenario que nos presenta ya sea mediante el abrazo espiritual entre Memo y Ova al encontrarse separados por la pared de la prisión, o sintiéndose inspirado por el amor de Memo hacía los animales o incluso verlo en sus quiebres al enterarse de la muerte de su abuela y de su sentencia de muerte al percibir la horca afuera de la oficina a minutos de despedirse de su hija, por la última vez.

Hay mucho más de lo que quisiera comentar, pero sería injusto de mi parte revelarles por completo el tercer acto porque al igual que yo, lo mejor es entrar a esta historia desde cero porque es inevitable que no te sientas contagiado por cada detalle narrativo. Además, con este elenco, nunca llegué imaginar la capacidad cinematográfica con la que contaban los turcos. Vaya manera de quebrarnos el corazón en mil pedazos y todavía uno teniendo que recoger las piezas porque los pensamientos no paran incluso después de haberse terminado los créditos.

Así que acércate tu cajita de pañuelos y un vaso de agua, los vas a necesitar durante todo este camino y pase lo que pase, recuerda que está bien conectar con nosotros mismos y liberar nuestros sentimientos. No te quedes con nadas, sácalos y disfruta de esta conmovedora, mejor aún, vívela y quédate con ese mensaje de esperanza, compasión, perdón, respeto, tolerancia, justicia y, sobre todo, de amor.  Todo eso y más es notorio en la mirada de la futura novia con la que se nos presentó y con la que cerramos esta obra maestra. 

¡Me Dueles Interestelar…! ¡Qué Decepción…!

Esta nota se encuentra actualmente participando en el Desafío Peliplat Agosto 2025 en el sguiente link:
https://www.peliplat.com/es/article/10073214/me-dueles-interestelar-que-decepcion

 

11 años después de haberla visto en los cines y todavía sigo lidiando con esa ausencia de espiritualismo en Interestelar donde la humanidad carece de luz y la esperanza depende solamente de la ciencia y tecnología en su estado más puro y no adulterado.

Siendo honesto, fui de aquellos que despreció la propuesta de los hermanos Nolan, por decir que no pude conectar de la misma forma en que lo había hecho con la Trilogía de El Caballero de la Noche y El Origen. Esto debido a su tono sombrío y atmósfera depresiva en la de por sí compleja, dispersa, confusa e infinita narrativa con la que se nos bombardea desde el primer hasta el último minuto.

No la comprendí durante su estreno en el 2014 y me negué a hacerlo; y cómo podría cuando me encontraba sumergido en la fiebre de los superhéroes, tras el auge de Los Vengadores de Marvel, El Sorprendente Hombre Araña de Sony Pictures y El Caballero de la Noche Asciende de DC Comics en el 2012, digamos que esto puso en riesgo a producciones arriesgadas, realistas e innovadoras como Interestelar, la cual pudo respirar el aire del éxito con su recaudación ahora de $ 758.6 millones gracias a su relanzamiento a finales del año pasado por su Décimo Aniversario..

Mi mente no era tan flexible en ese entonces debido a que le daba mucho peso a mis sentimientos, así que si algo me hacía sentir incómodo e incompatible, lo desechaba hasta el grado de olvidarme por completo. Justo lo que pasó con Interestelar. Ya con los años, tuve que aprender a no dejarme influenciar por situaciones del pasado ya que nublaban mi mente al malinterpretar ciertos escenarios, en vez de poner un poco de mi esfuerzo para tratar de comprenderlos.

Al parecer, todo era cuestión de tiempo para desarrollar esa madurez reflexiva y de la gravedad para impulsarme a darme esa segunda oportunidad de aventurarme en lo teóricamente y científicamente propuesto por Interestelar con respecto a la humanidad y su salvación tanto física como de su espíritu.

Con la mente en blanco, decidí salirme de mi zona de confort debido a que yo ya venía con la idea de hablarles de la humanidad según Andor, pero después de un año de estar participando "cómodamente", opté mejor por tomar este Desafío como literal y qué mejor que quebrarme la cabeza en compañía de esta comunidad cuyas contribuciones son de aplaudirse por los conocimientos compartidos, sus retrospecciones y por hacerme sentir toda clase de emociones porque hago lo posible por leer sus artículos y comentarlos, aunque me falta tiempo.

Más vale tarde que nunca, y ya que nos encontramos hablando de la humanidad, qué mejor que aprovechar para agradecerles de corazón su apoyo y muy en especial a Peliplat por regalarnos este espacio en donde tenemos la oportunidad de hacer arte mediante nuestras palabras. Así que, gracias a todos ustedes y un aplauso por su valiosa aportación.


Ahora, metiéndome de lleno a la trama, o mejor dicho a la trampa, confieso que me sentí mareado ante la situación crítica en la que se encontraba la humanidad. Hablando de hambruna, crisis existencial y degradación ambiental a causa de tormentas de polvo sucediendo alrededor del planeta y las plagas, las cuales en conjunto colocaban a la Tierra al borde de la extinción siendo la única “esperanza” la agricultura financiada por el Gobierno ante el desmantelamiento de la NASA. Vaya ironía.

En ese futuro distópico, si prestamos atención a las referencias culturales de Donald (el padre de Joseph, nuestro protagonista) sobre el béisbol profesional y los primeros años de innovación tecnológica, podemos deducir que el primer acto de Interestelar transcurre aproximadamente en el año 2050. A tan sólo 25 años de diferencia, no puedo evitar sentirme que vamos directo a esta realidad planteada por los fenómenos naturales que nos azotan de manera imprevista cada año y no se diga de la escasez de los recursos vitales y el acelerado Calentamiento Global a diferencia de cómo estábamos a principios del 2000.

Resulta curioso analizar cómo la solución parece estar en el cielo y no en la Tierra, en donde tenemos los pies “bien” puestos. Es más fácil dejar volar nuestros pensamientos y en vez de solucionar nuestros problemas, mejor escapar de ellos y empezar desde cero en otro planeta condenando a la Tierra y sus habitantes a su extinción, porque bajo esta narrativa el factor divino no tiene papel, mucho menos presencia. Es más, su luminosidad es inexistente, la raza humana como sí está y siempre ha estado sola desde el principio y depende de ella misma resolver el problema y punto.

Por esa razón el primer acto me resulta inquietante y depresivo, porque como cristiano me obligan a olvidarme de Dios por casi tres horas para depositar mi fe en una ecuación fundamentada por la tecnología y la ciencia a través de los datos cuantificables de un agujero negro. Y con la música de Hans Zimmer acechándome a cada rato, es imposible no contagiarme de esta resignación y desesperanza que a duras penas se mantiene a flote en Murph (la hija de Joseph), cuyo significado de “si algo puede salir mal, saldrá mal" es reinterpretado por "lo que pueda pasar, pasará".

El valor de la Familia juega un rol esencial en este rumbo trazado hacía la salvación de la humanidad, ese impulso de un padre a tomar la decisión más dura de abandonar a sus hijos para asegurar su futuro es un vínculo que cada padre puede entender porque perder a un hijo equivale a perderlo todo. No hay cura para el corazón roto ni suficiente motivo para seguir viviendo porque un padre nunca debería ver a su hijo morir, no se considera “natural” por así decirlo.


Y es esta relación entre Joseph y Murph, padre e hija, lo que le da fuerza y sentido a Interestelar justo en el desenlace, después de estar perdidos la mayor parte del tiempo. Murph había sido elegida para salvar a la humanidad y gracias a su conexión con su padre, Joseph se convirtió en el conductor y mensajero, sólo él en su función del Fantasma consigue llevar a cabo su propósito para comunicarse desde el “futuro” hacía el relativo “pasado” de su hija mediante infinidad la fusión de escenarios originados en su recamara a través de los tiempos.

A pesar del primer mensaje transmitido, Joseph hace caso omiso de quedarse y decide confiar en la ecuación del Profesor Brand de viajar al espacio por dos años para atravesar el agujero negro del cual misteriosamente apareció cuando lo necesitaban. Depende de nosotros llenar ciertos huecos en los métodos ejecutados o abstenernos de darle un sentido lógico a estas representaciones que en parte son “exactas” dado que la producción contó con un asesor científico que las revisó y validó, aunque requiera que investiguemos de nuestra para intentar comprenderlas, más ese no es el punto.

El punto en sí es de lo que somos capaces de hacer cuando nos enfrentamos a nuestra propia extinción. ¿Qué es lo que nos motiva a tomar cuestionables decisiones y más cuando omitimos la creencia religiosa y nos basamos en lo que podemos ver y tocar, como lo es la tecnología y ciencia?

Esa respuesta no se nos da en el segundo acto, en donde una vez atravesando el agujero negro, Joseph y la tripulación del Endurance deben ser muy cuidadosos de la relatividad del tiempo porque para lo que ellos puede tomarles una hora de exploración en el Planeta Miller, en la Tierra ya transcurrieron 7 años. Wow, el horror de solo pensarlo.

Tal vez y esta ansiedad de tiempo sea un reflejo directo de nuestro miedo de ver el tiempo fugarse frente a nosotros, ya que el sólo hecho de regresarte 10 años te pega duro conforme adquieres edad. Por tanto, es evidente como el tiempo es y sigue siendo considerado nuestro enemigo y a la par de Joseph, captamos su valor, aunque nos cueste entenderlo y nos duela aceptarlo. Por eso la importancia de aprovechar cada minuto, porque nunca sabemos cuándo será el último; aún sean sólo cinco minutos, siguen siendo tan valiosos como se nos muestra durante el reencuentro entre padre e hija.

El lado feo de la humanidad se presenta a través del Profesor Brand y del Dr. Mann. Primero porque Brand le miente a Joseph para convencerlo de abandonar a sus hijos y hacer ese tan necesario viaje cuando de antemano sabía que su ecuación era falsa porque no existía solución alguna con o sin los datos estadísticos del agujero negro. Entonces, siempre se trató del Plan B, empezar desde cero en otro planeta y deja morir a la Tierra con sus habitantes. No hay nada más terrible que la pérdida de la esperanza y más estando cerca de la muerte.

En cuanto al Dr. Mann, interpretado por Matt Damon cuya inesperada presencia me hizo gritar en el cine, una escoria desde antes que quedara atrapado en su planeta. Difícil de aceptar que en su instinto de sobrevivencia haya optado por falsificar la información de su planeta como opción viable a repoblar sólo para esperar en el crio sueño a ser rescatado, y cuando lo es, decide traicionar a los suyos hasta el grado de asesinar. Y ahí no fue a parar todo, sino en un acto egoísta por la preservación de su vida pone en riesgo al Endurance (la nave principal).

Aparte de haber obtenido una secuencia de acoplamiento impresionante que por sí sola amerita el Oscar por los efectos especiales, es la actuación de Matthew McConaughey como Joseph Cooper quien nos demuestra la capacidad humana de hacer lo imposible posible a pesar de ignorar los cálculos de los robots o mejor dicho, de la inteligencia artificial. Al final, todo recae en el tacto y en el impulso de no abandonar a tus seres queridos, y eso es lo que destaca a la humanidad según Interestelar.


Sí, efectivamente nos respaldan la ciencia y tecnología, pero con o sin el factor divino, el amor es lo que hace la gran diferencia y lo que nos impulsa a luchar no sólo por nuestra sobrevivencia sino por la de nuestros seres queridos. El amor es cuantificable y por ese mismo amor, la propia humanidad en su fase avanzada diseñó el Teseracto para permitirle a Joseph navegar por las cinco dimensiones, y mediante la fuerza de gravedad lograr comunicar los valores necesarios a su hija Murph (siendo la clave el reloj), puesto que la gravedad a traviesa el tiempo.

TARS podría ser considerado como la Inteligencia artificial que acompaña a Joseph en los momentos críticos de la misión, y termina siendo un excelente ayudante cuando ambos se pierden en el agujero negro, alias el Teseracto. A pesar de que TARS procesa este amor como sin sentido, para Joseph lo tiene y es ahí donde entra la fe por la conexión que comparte con su hija porque al igual que la gravedad, el amor trasciende por todas las dimensiones hasta atraer a Murph hacía el reloj y redescubrir que su Fantasma había sido su padre todo este tiempo.

Como tal, el tercer acto no sólo redefine la confusa y deprimente narrativa con la que empezamos sino que le inyecta de un sentido y una brillante dirección a lo que podría ser nuestro futuro como raza humana. Creyente o no creyente, al final vamos a estar bien porque el amor que sentimos hacia nuestros hijos y prójimos es lo que siempre nos impulsará a hacer la gran diferencia hasta en los momentos más brutales. Aunque nos cueste caro.

Murph era una innovadora mientras que su hermano un conformista, pero Murph tampoco hubiera dado con su padre sino fuera por su hermano al igual que la mentira del Profesor Brand como las malas intenciones del Dr. Mann. Todos tenemos un propósito para bien o para mal, una conexión y un sentimiento que gracias a la gravedad y al respaldo de la ciencia-tecnología, la humanidad ha logrado resolver algunos de los problemas con los que se ha topado desde su existencia.

En conclusión: ¡me dueles Interestelar…! me dueles tanto por lo que me hiciste pasar en estos 169 minutos de quebradera de cabeza. Tuve que jugar tu jueguito de omitir el factor divino, tragarme el aislamiento y la desesperación y asumir que somos seres sin luz y condenables por nuestro egoísmo. Por ende: ¡que decepción de raza humana somos!, lo cual no debería ser sorpresa para las mentes cínicas como la mía, en momentos.

No obstante, puedo sentirme tranquilo por finalmente entender el Teseracto y su propósito durante el tercer acto, ya que gracias a esta comprensión, logré ver la luminosidad en toda esa oscuridad. Sólo era cuestión de leer entre líneas y abrir bien los ojos para percibir la importancia de ser siempre perseverante, aunque nos lleve a la muerte y a depositar nuestra fe en la esperanza y en el amor porque sólo así es como saldremos siempre adelante, eso y la urgencia de hacer conciencia sobre el cuidado de nuestro planeta.

Todo esto lo aprendí del protagonista Joseph, y a pesar de haberle costado su tiempo con su hija, su vida continuó bajo el propósito de reencontrarse con su compañera Amelia (la hija del Profesor Brand), quien estaba por sumergirse en el crio-sueño para dar inicio a una nueva fase de repoblación en otro planeta no tan distante al que había dado a parar.

De antemano, gracias por leerme.

domingo, 3 de agosto de 2025

Comentario especial de Thrawn: Alliances


El camino a la Segunda Temporada de Ahsoka sigue en marcha con #Thrawn #Alliances del autor #TimothyZahn y he aquí mi humilde punto de vista.

sábado, 2 de agosto de 2025

Bokken News: El Retorno de Star Wars y Mucho Más.


En este inicio de semana continuamos con grandes novedades de una Galaxia Muy Muy Cercana, dale clic y descubrelas.

 

Este artículo se encuentra participando en el Desafío Peliplat Agosto 2025 
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As soon as I discovered that one of the challenges was to talk about foreign films that transcended the world, regardless of whether they were spoken in a language other than our own, the Turkish drama Miracle in Cell 7 immediately came to mind, giving me the perfect excuse to not only watch it again, but also to promote it through one of my writings, giving those who haven't seen it the opportunity to be part of this wonderful and sensitive experience from the first minute to the last.

The first time I learned about this retelling, given that it's inspired by the 2013 South Korean comedy-drama, was a couple of months after the Covid-19 quarantine was announced. I always like to emphasize the importance of recognizing this crisis, even if the entertainment world has ignored it. The important thing to emphasize is that we are survivors. Also, we need to acknowledged what it cost us. This in regards to the sacrifices we had to make, and to mention those we had to leave along the way.

Back then we didn't know with certainty what was going to happen to us and the world. At least the streaming industry turned to international titles to distract us, and thanks to this alternative, I discovered this gem, which, in its 132-minute runtime, gave me the relief that both my family and I needed at the time. Not only that, but it made me believe in humanity again, thanks to its message of love shown in its purest form.

I remember it only took me half a minute to stop the promotional cutscene and immediately play the whole film. I had already heard wonderful things about it on social media just a few days after it became a huge sensation on Netflix. I confess that I'm not a fan of movies spoken in other languages, I can accept Spanish productions due to a certain familiarity with their culture, history and language, specially language as me being Mexican.

I knew nothing about Türkiye, and I wasn't interested in learning about it. Still, I felt the pull, and boy were they right when they called it an emotional roller coaster because, after The Passion of the Christ (Mel Gibson’s historical drama from 2004), I'd never cried so much in my grown-up life, and it started right when we meet Memo, a mentally handicapped single father who is wrongly accused for murder.

Aras Bulut İynemli portrayal as Memo is mesmerizing and so beautiful to see, either alone or surrounded by people, it breaks your heart. Every time he emphasizes a word or displays any gesture. His body language is, in a word, absolute perfection. It is impossible not to fully support him and not get psychologically involved in everything he ends up suffering.

The plot begins in 2004, where we meet a beautiful bride-to-be whose face is moved upon hearing the news that the death penalty has been abolished in Türkiye. Through the relic she holds in her hands, we are transported to a delicate time she endured with her father when she was just a child with whom she shared the same mindset, respectfully speaking.

The narrative unfolds in three acts, the first of which places us in the middle of this tender and entertaining relationship between father and daughter, overseen primarily by Grandmother. The only one in the house and in the town who cares about her son-in-law and gives him the strength to keep going despite the constant abuse he receives from people who refer to him as the town's crazy or retarded person.

Having myself experienced speech disorder during my childhood, I couldn't help but identify with the bullying Memo suffered. I regret to say it brought back some bad memories, since children tend to be very cruel. Meanwhile, the pressure from adults who force you to "pronounce correctly" does not help. Neither to insult them by using awful nicknames or adjectives. This only ends up being psychologically damaging. This shouldn't be the case because no one, absolutely no one, should be defined or treated according to their disorder.

Our personality goes far beyond our physical or expressive capacity. We are human beings who feel countless emotions and go through different phases, whether alone or in company. And thanks to the leading role of Memo and company, this film fulfills that need to show us what it truly means to be human and the constant vulnerability experienced by those who cannot defend themselves.

There is a scene where, after being beaten by a Lieutenant Colonel, Grandmother consoles her son Memo by telling him to never feel less, because he is much more than the sum of all the insults, which Memo does not even consider, since he is only concerned about the happiness of his daughter Ova, and seeing her sad for having witnessed his beating causes him to fear that she will never smile again. To which his grandmother tells him: not to worry because she will smile again, although not under the desired circumstances for the reason that this is only the prelude to the horror that is coming for Memo and his beautiful family.

If Aras's gestures and body language alone kept you intrigued, now adding the innocence with which Nisa Aksongur develops as Ova is devastating to experience since their relationship is authentic and an emotional guarantee. Ova's gaze reaches your heart; the love for her father is evident and mutual.

There is a dialogue where Ova's teacher declares that she is envious of the passionate way in which father and daughter hug each other. She confesses that, despite having a good parent, she regrets never having been able to hug him the way Ova does, which made me give my own parents a big hug because this gesture of love is pure joy, and the best part is that it is free to give and receive.

No one is exempt from death, at any moment we can become angels as happens with Memo's wife and Ova's Grandmother, who could not continue when they were most needed. That said, the second acts sees Lieutenant Colonel abusing his military power to make an example of Memo, blaming him for the murder of his daughter, and therefore destining him to be hanged, but not before destroying his life and that of his family.

It is a heartbreaking experience due to the brutality in which Memo founds himself, from his arrest to the tremendous beatings by the soldiers and then his cellmates. But here is the twist, they get to really know him, his innocence and infinite kindness. After all he went through, he immediately warms their cold hearts bringing out that human side that they had forgotten they had.

In the blink of an eye, Cell 7 becomes a community of people who realize their sins and embark on a path toward redemption by not only caring for Memo’s safety but also helping him reunite with his daughter, and consequently trying to secure his freedom at the expense of their own.

While evil seems to be in control, goodness gradually escalates to the point where faith and hope becomes a possible reality to which we must always cling. That impulse, on its own, is what makes us see how beautiful we can be when it comes to giving and receiving love.

In this world, we are not exempt from evil, so we cannot allow hatred and prejudice to dominate us for something beyond our understanding. We must always give the benefit of the doubt, not judge, and truly see our neighbor for who they are and not for who we want them to be.

This projection of oneself does distort our reality, adding fuel to the fire, so to speak, because we are capable of that and more. It is what we are, what we carry within us, light and darkness, and it is up to us to decide which one we want to prevail over the other.


Therefore, Miracle in Cell 7 is a clear example of how we ourselves have the capacity to make a change within ourselves and to change others through human kindness. Even though the words are in a different language, the sentiment is so clear in every scene presented to us, whether it's the spiritual embrace between Memo and Ova when they're separated by the prison wall, or feeling inspired by Memo's love for animals, or even seeing him in his breakdowns upon learning of his grandmother's passing and his death sentence.

Witnessing his fear of becoming an angel, minutes before saying his last farewell to his daughter was devastating to the soul. And there it relies his third act, an act that speaks about forgiveness and the salvation of the soul. About that, there's so much I'd like to comment, but it would be unfair of me to give you all the details.

Like me, it's best to approach this story from scratch, since it is inevitable not to be infected by every narrative detail. Also, this cast is amazing. What a way to break our hearts into a thousand pieces, and still have to pick them up. Take it as a warning, but you will be invaded by all kind of thoughts after the credits have rolled.

So, grab your box of tissues and a glass of water. Believe me when I say that you are going to need it and all the way, and no matter what happens, remember that it's okay to connect with ourselves and release our feelings. Don't hold anything back; let them out and enjoy this moving piece of art. Better yet, live it and retain its message of hope, compassion, forgiveness, respect, tolerance, justice, and, above all, love as it is reflected on the eyes of the bride-to-be whom we are introduced at the beginning and in the end.

There are no limits when it comes to pure and raw emotion, and without a doubt, Miracle in Cell 7 is a cinematic experience that pierces you. Just as I needed then, I found myself needed it today to acknowledged how fragile life is when evil stalks us from all sides, and also how beautiful it can be when you're surrounded by people who cared for you.

So, whenever you have the chance to hug someone in the same fashion as Memo and Ova, do the same with not only your loved ones but your neighbors because all we need is love to make a difference.