Iniciamos la Segunda Temporada con una gran bienvenida a Merlí por parte de los peripatéticos con quienes de inmediato les enseña de los Presocráticos. Estos filósofos que se la pasaban haciendo preguntas sobre la vida, todo lo que observaban sin importar que no tuviesen las respuestas ya que cuestionarlo todo era lo esencial como siempre lo ha inculcado Merlí desde el primer día. Aquella frase al final despertó una serie de preguntas que también aplicaría para nosotros. Es evidente que la serie no pretende frenar en su contenido, y eso es lo que me sigue gustando y más con la llegada de Coralina.
Un poco de conflicto entre Eugeni y Merlí nos cayó bien aunque eso está por cambiar, Gina estuvo menos presente y menos tras descubrir una mentira. Me sorprende ver al Tony frustrado, y creo que es la primera vez que prestó atención a las señales. Oksana no tardó en mover el gallinero, sin duda jaló la atención por la forma en que le tiró el rollo a Gerard y tuvo algo con Marc para crearle celos. Al menos dice lo que piensa, al contrario de Mónica que nomás se complica y vaya que Joan está mostrando su verdadera faceta de imbécil por la forma en que le reveló a Gerard su noviazgo secreto.
Tuvimos una gran escena entre Bruno y Merlí, se comprende los celos hacía Iván y Pol, Merlí ha llevado a cabo una buena relación con ellos hasta el grado de traerse de regreso a la escuela a Pol quien debe lidiar con su familia al optar por trabajar. El pleito con el padre como con Merlí nos demuestra la madurez que ha estado obteniendo Pol, ya que no es el mismo chaval despreocupado que sólo anda de chica en chica. No sólo cuenta con el conocimiento sino le da buen uso a la filosofía en su vida al hacer importantes argumentos que algunos no nos hubiésemos hecho en esa edad.
Regresando a Bruno y su momento con su padre, el ejemplo de la muñeca me gustó porque es algo con lo que los padres deben lidiar y resulta una tristeza porque no debería crearse ese temor. Ciertamente el que haya normas no significa que no deban agredirse, y una coma (No, tenga piedad) puede salvar una vida por lo que he aquí la importancia de lo que es estudiar y si me quedó pensando sobre que sí ¿un político inteligente tendría futuro entre tantos imbéciles con derecho a votar?
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