Han pasado dos años desde la espectacular y conmovedora conclusión de
Harry Potter en Las Reliquias de la Muerte Parte 2 y la saga todavía sigue fuerte
desde su origen con La Piedra Filosofal en noviembre de 2001. Actualmente se
proyecta un total de 500 millones de novelas vendidas a nivel mundial y se
mantiene con una recaudación de $ 7.7 billones de dólares en la Taquilla con la inversión de
sólo 1 billón, sin contar los costos de la mercadotecnia.
En diciembre de 2011 adquirí a la venta el paquete limitado de 8
películas en Blu-ray y desde entonces no había tenido la oportunidad de revisar
la colección entera hasta esta semana. De la misma forma como me puse de reto
en diciembre 2010 de leer cada novela y consecutivamente ver cada adaptación,
me puse de objetivo ver una película cada día en estas breves vacaciones.
Asimismo estuve revisando las columnas de análisis entre
novela-película recordando algunos aspectos que había olvidado. Sería
interesante volver a leer las novelas pero me temo que no gozo del mismo tiempo,
entretanto me conformó con las películas porque incuestionablemente el crecimiento es fascinante. Este desarrollo de personajes a través de los años
denota madurez en el trio principal y sus historias.
Desafortunadamente mi viaje al pasado sólo recae en diciembre 2010
cuando me regalaron las primeras tres novelas, debido a mi preferencia por El
Señor de los Anillos y mi enfoque en las precuelas de Star Wars, nunca le di la
oportunidad a esta franquicia. Recuerdo haberme sentado a observar La Piedra Filosofal
pero debido a encontrarse a mitad, no le comprendí y por ende, la dejé de ver.
Conforme pasaban los años, los avances comenzaron a llamarme la
atención pero debido a mi excusas por estudiar y por haber carecido de ver las
entregas pasadas, simplemente desviaba mi atención al verdadero problema. No
obstante, todo pasa por alguna razón y podría decirse que mientras muchos
esperaron año por año, yo sólo esperaba mes por mes y al final, tuve la oportunidad
de ver la última entrega en 3D.
Como toda canción, película o fotografía, el contenido nos puede
regresar a esos viejos tiempos y hacernos recordar de los sentimientos de ese
entonces. Si analizamos de cerca estos detalles podremos distinguir nuestra
forma de pensar y nuestra evolución por más mínima que sea. La experiencia
cambia por causa de nuestra percepción y dicho esto, quizás algunos puedan comprender
porque J.K. Rowling optó un epilogo situado 19 años después de la Batalla de
Hogwarts.
Admito que esta franquicia no es perfecta, tiene las bases pero hay
ciertos errores de continuidad que necesitan de las novelas, por ejemplo: El
Misterio del Príncipe. En conjunto, son una adaptación formidable y estable por
su buena ejecución del drama, acompañamiento visual, humor, música y épica
conclusión. Se desconoce si el futuro nos regresé a este universo dado como las
secuelas o precuelas de franquicias veteranas está de moda.
Ignoró si el paquete de colección de Blu-ray sigue a la venta en las
tiendas, tengo bien grabado su comercialización de forma limitada. De igual
forma, existe otras dos ediciones especiales cuyo costó incrementa de los $ 60 dólares a los
$ 300 dólares. Para los seguidores comunes de esta franquicia, les recomiendo
adquirir este paquete básico porque sale más barato que adquirirse individualmente.
La conversión de las primeras partes en alta definición brinda nitidez
a pesar de su tonalidad oscura. El sonido es de alta calidad y los colores en los
efectos especiales están bien representados. Obviamente desde la quinta entrega, este
departamento se lucía en las secuencias de acción, las cuales se mantienen fiel
a su espíritu, siempre y cuando se posea el equipo de reproducción requerido. El arte de la
caja es básico y las ilustraciones de los discos es sencillo, a excepción del séptimo
el cual está en negro.
En conclusión, Harry Potter ha dejado su huella no sólo en el mundo de
la literatura sino en la industria del cine. Durante una década formó parte de
nuestra cultura e influenció el estilo de hacer cine, quizás afectó la división
de la última en dos partes porque ahora cada estudio tiende a aplicarlo, sin
embargo, este legado merece crédito porque ni siquiera James Bond en sus 50 años ha logrado consolidarse linealmente como lo hizo Hary
Potter desde el Año 1.
Por ende "Él éxito de una saga depende de una visión" y Harry Potter es un ejemplo de ello e compañía de La Trilogía de El Caballero de la Noche y La Saga Completa de Star Wars.
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