domingo, 11 de noviembre de 2012

Crítica de Argo

 
 
El suspenso americano basado en la crisis de rehenes de Irán de 1979 es una obra tensa, emocionante, divertida y de notable valor. Las recomendaciones claramente están justificadas porque esta adaptación cumple con su propósito de entretenernos con una realidad pasada. No cabe duda que Ben Affleck ha resultado una sorpresa en el campo de dirección puesto que su futuro después de la actuación está fijo.
 
Generalmente se trata de un rescate organizado desde una serie de malas ideas en las oficinas de la CIA. La secuencia inicial de la toma de la embajada estadounidense es extraordinaria no sólo por ubicarnos en el contexto narrativo sino por engancharnos hacia los seis individuos que lograron escapar a tiempo. Lo que sigue a continuación es una serie de pasos que involucran la industria del cine hasta concluir en el paraíso infernal.
 
Inevitablemente el guion de Chris Terrio ha estado recibiendo controversia por algunos segmentos inexactos mas se tratan de daños mínimos tomándose como motivos dramáticos ya que dentro de una adaptación, está permitido delimitar o ampliar ciertos eventos para generar el apego sentimental y el suspenso requerido. Y vaya que son dos elementos llevados a cabo en una máxima capacidad.
 
El desarrollo de personajes es ingenioso por desenvolverse en cuartos ocultos y a través de imágenes o reseñas curriculares. De los más dominantes obviamente es Tony Mendez lo cual no descartaría la idea de diversas secuelas o precuelas basadas en su carrera porque sin duda se trató de una profesión impactante. El resto de los operativos de la CIA acude a lo básico mientras los trabajadores de la industria fílmica son simpáticamente hilarantes. En cuanto a los seis diplomáticos, la situación del ambiente fue influyente para interesarnos en sus respectivos roles.   
 
A pesar de una despiadada ola de furia en los habitantes de Irán, no puedo evitar sentir un filtro de respeto en sus acciones por centrar sus razones. No por generalizar pero el por qué y la forma están expresados y sustanciados por material verídico. Esas miradas de odio en los rostros, especialmente de las mujeres, e ideologías venenosas son poderosos factores a analizar. Asimismo la situación en Estados Unidos sobre la justicia propia se asimila al 911 cuando los árabes eran señalados por su físico.     
 
Entre las intensas pláticas sobre la gestión de justicia o actos de los hombres, el sistema operativo de los centros de inteligencia, el ambiente cinematográfico y la iniciativa de hacer el bien o conformarse en un estado de neutralidad, Ben Affleck logró un éxito. Cualquier que la ha visto se lo reconoce, es más, los números en taquilla lo respaldan en conjunto con la comunidad crítica.
 
Sí Atracción Peligrosa te pareció genial, Argo te será más poderosa. La dirección de Ben Affleck se multiplicó en calidad por recurrir al suspenso y mantenerlo en constante paso. En pocas palabras, siempre están al borde de tu asiento. Gracias a su experiencia en la seria actuación, el reparto nos extrae desesperación, sufrimiento y preocupación. En momentos nuestra nerviosidad se relaja con diálogos divertidos pero generalmente es la intriga y el desconocimiento de la conclusión lo que nos tiene inmersos.
 
Para haber creado esta atmosfera multifacética dentro de una historia real se requiere de un gran talento. Al igual que muchos que seguimos creyendo que Atracción Peligrosa debió haber recibido mucho más nominaciones hace dos años, Ben Affleck cuenta con más posibilidades de atrapar las categorías de Mejor Actor, Mejor Director y Mejor Película. Aparte de que el guion, la cinematografía, la edición y algunos papeles de reparto no están descartados. Sin embargo, no es una película asegurada al triunfo pero sin duda dará su batalla.   
 
A parte de una brillante dirección, Ben Affleck se desenvuelve con un protagonismo creíble. En la representación de Tony Mendez, Affleck luce un carácter serio y extremadamente tranquilo. Todo el tiempo se mantiene inexpresivo que llega a ser difícil de reconocerlo con su imagen. Como lo mencioné al principio, no me sorprendería verlo regresar en futuras entregas de este famoso agente a la Jack Ryan.  
 
Alan Arkin cuenta con posibilidades de adquirir otra nominación en compañía de ohn Goodman. Ambos comparten una excéntrica química ya que su sarcasmo es material de oro. Bryan Cranston es estable en el principio pero es al fin donde verdaderamente roba escena al impulsar el peligro de la misión. En referencia a los seis diplomáticos: se aplaude el rol asumido por cada de uno de ellos porque si no fuera por su realismo sentimental, el relato simplemente se hubiera vuelto obsoleto, lo cual fue completamente el lado opuesto.    
 
Los últimos 10 minutos de la trama son el principal resalte y la razón detrás del triunfo actual de Argo. Toda una introducción preparada, un portafolio de caracterizaciones definidas y una estructura de acciones y consecuencias guiadas hacia una poderosa catarsis conclusiva. Todo esto llevado a cabo en las manos de William Goldenberg. Anteriormente nominado por su trabajo en Seabiscuit y exitoso por Tesoro Nacional 1-2 y Transformers 3. Después de haber trabajado en producciones de acción, creo que al igual que Affleck, Goldenberg verá su regreso con una asegurada nominación.
 
Como breves mención, la cinematografía no es visualmente atractiva pero ello es el punto porque en orden de crear un espacio caótico, la oscuridad debe adueñarse de las localizaciones. Como seguidor de la saga, aprecié las referencias a Star Wars y en cierto modo observé como como este primer episodio conquistó al mundo en 1977, por tanto era lógico el sello fílmico en la operación Argo puesto que la ciencia ficción estaba en su apogeo y era el único camino para desarrollar la encubierta secreta.       
 
En conclusión, una historia que debe verse no por su temática controversial sino por el gran desempeño actoral, la intensa edición y la extraordinaria dirección de Ben Affleck.     
 

1 comentario:

manipulador de alimentos dijo...

Entretenida, con ritmo, a la vieja usanza, también previsible y superficial, 'Argo' sin embargo es una prueba más del talento narrativo de Affleck. Un buen rato de cine, que es mucho, pero tampoco nada más. Saludos!!!!