sábado, 17 de abril de 2010

Crítica de Furia de Titanes

Después de varias semanas de una agresiva mercadotecnia, posters por doquier, entrevistas en la televisión, recaudaciones de su taquilla internacionalmente y domésticamente; finalmente el día de hoy fui a ver la Furia de Titanes (Clash of the Titans). Efectivamente cumple con lo mostrados en los cortos, mitos, acción, aventura, poco drama y solo unas echadas de ojitos para los románticos.
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Nunca entendí la comparación con 300, son productos muy diferentes; los cuales no existen similitudes mencionadas. Titanes intenta ser más clásica, aventura y memorable mientras 300 fue cruda, violenta y acción sin nada de temática que la apoyará. Sin mencionar que la escenografía de Titanes incluyó más paisajes, diversidades de tonos y realismo en lugar de haber filamdo bajo pura pantalla azul como lo hizo la otra.
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En cuanto a las secuencias de acción, la cámara tiende a moverse no bruscamente pero si constantemente para entregar intensidad, las animaciones son muy buenas incluyendo las de los Escorpiones, Medusa y el Kraken dónde pueden ser las mejores partes de las películas. El suspenso es utilizado excelentemente y en cuanto los dioses, muestran impresionantemente el contraste y balance mediante los efectos visuales.
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La historia es sencilla pero rodeada de algunas leyendas y orígenes, no hay mucho por contarse; algunas de hecho las conocemos o las intuimos. En veces se puede sentir confusión pero es porque la película avanza rápidamente, pero no hay dudas… simplemente es dejarse llevar. Los diálogos son efectivos y normales, si no me equivocó existen uno que dos memorables de los cuales los escuchamos en los cortos (Release the Kraken or One day, somebody's got to say enough...) al estilo de Troya (Inmortality, take’t it’s Your) o 300 (This Is Sparta), pero por alguno razón no han sido tan potentes debido a que nos sean familiares o falté credibilidad.
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Las actuaciones, Sam Worthington no es extraño en las películas de acción, después de todo ha hecho Terminator Salvation y Avatar, de las cuales fueron visitadas por los efectos y franquicia más no por él, pero de igual forma nos entrega otro personaje por quien seguir, es un personaje estable cuya presencia se nos es familiar, le faltará por ser extraordinario como Russell Crowe pero al menos es natural y sobreactua como otro compañero que tuvo en Terminator. Liam Nelson y Ralph Fiennes son los que levantan la película y mantienen el balance, actuaciones totalmente fáciles de distinguir donde efectos con caracterizaciones se mezclan para entregarnos esos momentos ricos de saborear. En cuanto al resto, todos funcionan de acorde a los papeles seleccionados.
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La música es un highlight instantáneo, quien la haya compuesto o se haya adaptada es perfecta para este tipo de película. Un poco hardcore pero es lo que necesariamente necesitaba la película y por ello, el ambiente se distingue con originalidad. La dirección habla por sí sola, no es un producto complicado, el enfoque es la acción y cumple; no esperes un desarrollo de personajes o historias, sólo son anécdotas que te dejan deseando saber más y de ello, depende de nuestra investigación.
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Finalmente, recomiendo la película, porque es una aventura llena de adrenalina que cumple con su deber. Después de verla en 2D, me doy cuenta que los efectos quizá si corran riesgo en 3D como varios críticos la han visto, debido a que las tonalidades de la película y la escasez de ambientes con diversidad de elementos no le benefician a comparación de Avatar donde pues son naves, tecnologías, el planeta diverso de Pandora. Pero pues eso ya depende de los gustos.

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