domingo, 21 de octubre de 2018

Crítica de Halloween (2018)


Halloween 2018: un logrado y respetuoso homenaje a John Carpenter ...

Hace un par de días me decidí por ver la original de 1978 llevándome no sólo un nerviosismo al abrir las puertas de mi casa sino una sorpresa sobre su cinematografía y estilo para tratarse de una adaptación de horror donde la psicología yace como el principal promotor del suspenso al lado de las acciones sangrientas de este misterioso psicópata.

Era tanto la espera en la primera hora que nos causa esa atmosfera de extrema tensión de la cual se desencadena en cuanto sucede el primer asesinato. Cabe señalar que dichos elementos se mantienen en su reiniciada secuela con la diferencia de suceder con mucha más prontitud y profundidad narrativa para los involucrados.  

Situada 40 años después de los asesinatos de Haddonfield, Michael Myers vuelve a escapar con la intención de asesinar a Laurie Strode quien pese al trauma de haber sobrevivido, ella se ha fortalecido y preparado para encararlo cara a cara y matarlo de una vez por todas antes de que acabe con su familia.

Debo confesar que mis expectativas se cumplieron al presentarnos un guión que ingeniosamente se las arregla para recontar un evento clásico con un mejor desenvolvimiento histórico y de contexto psicológico. No sólo se trata de ver muertes, sino de analizar como estas circunstancias suelen afectar nuestras percepciones y forma de reaccionar o inclusive obsesionarse.

El mismo suspenso continúa en entornos similares y hasta la misma música como tácticas llegan a ser una grata referencia al no saturarse ni recurrirse al avance tecnológico. Los asesinatos no figuran como el centro de la atención sino la anticipada reunión entre Michael y Laurie, la cual en una sola palabra resulta asombrosa.  

Difícil no sentirse nervioso ante la extraordinaria ejecución del director David Gordon Green porque vaya que te sacan un par de buenos sustos. Para tratarse de un director de dudosa comedia al ado de Danny McBride, debo admitir que hicieron un tremendo equipo al retornarle no sólo la credibilidad a la franquicia sino reposicionar el género con una elegancia clásica.

Obvio que el crédito viene acompañado de los editores de sonido y compositores porque desde los encuadres como la propia música, nos provocan cierto temor ante lo inesperado y en otras ocasiones, no hacen reír de algunas espontaneidades. Admito que no esperaba una postura seria en Judy Greer, es bueno que Hollywood les de la oportunidad de tomar otros papeles.

Imagino que haber trabajado con Ridley Scott en Alien Covenant inspiró y le abrió las puertas a Danny McBride de aventurarse al horror, enfocándose en narrar una historia con una intensa credibilidad en la protagonista porque resulta grato ver a Jamie Lee Curtis regresar al icónico rol de Laurie Strode.

Similar a lo que hizo Sigourney Weber con Ellen Ripley en Aliens, este tratamiento se vuelve a aplicar y vaya que funcionó a la perfección al reunirse también con Nick Castle, el originario Michael Myers. Su pelea personal es emocionante y contrasta con la dinámica vulnerable de la jovencita Andi Matichak.

No cabe duda que esta secuela directa ha sido una de las mejores desiciones y el tiempo dirá si existirá otra, aunque por el momento… la verdad es que así como quedó sería lo mejor.

Calificación: 4½ de 5 estrellas

miércoles, 17 de octubre de 2018

Crítica de Ha Nacido Una Estrella (A Star Is Born)


Nominada a mejor película 2018: 'A Star is Born' • ENTER.CO

El famoso Jackson Maine se encuentra lidiando con las drogas y el alcohol hasta que conoce a Ally, una chica común en quien descubre esa poderosa voz y letra que la pondrán rumbo a la fama mientras éste se encuentra en declive. Y pese a los conflictos personales, ambos luchan por mantenerse a flote a través del mutuo amor que comparten al lado de la música.

Siendo la cuarta adaptación y teniendo en referencia la aclamada producción de Barbra Streisand, podría decirse que Bradley Cooper no la tenía tan fácil, y en parte fue bastante valiente para arrojarse al ruedo tras no concretarse las negociaciones con Clint Eastwood y Beyonce. Mejor para todos porque esta historia se torna en otro éxito clásico que no puedes dejar de aclamar.

Cooper no sólo se limitó a la dirección, lo cual debemos destacar que debutó en la cima considerando como cada uno de los encuadres fueron ingeniosos no sólo para desenvolver las interacciones sino la propia música. Todo tiene un significado, una excelente edición e iluminación hacen brillar de por sí la ingeniosa química entre Cooper y Gaga.

La música aquí juega un papel sin duda esencial porque el sentimiento es tan intenso que te llega hasta lo más profundo del alma, por decir que Shallow te conmueve mientras I’ll Never Love Again te destroza el corazón. Ya sabíamos del don que tenía Gaga pero en el frente de la actuación, incluso esos nervios y evolución en su personaje la hacen una candidata al Oscar.

El repertorio es amplio porque tenemos otras canciones como Heal Me, Black Eyes, Diggin’ My Grave, Always Remember Us This Way… y Bradley demuestra estar a la altura pese a nunca haberlo escuchar. Ni se diga de la asombrosa química con Gaga. Estoy seguro que el 2019 podría ser su año y tiene desde muchos angulos considerando el guión, actuación, dirección y producción.

Ese toque conmovedor que le da a la historia, no sólo brindó su perspectiva sino incluso respetó la esencia y aprovechó para modernizarla de un modo que es perceptible a nuestra realidad. Cualquiera podría comprender o identificarse. Creo que te hace soñar y volver a creer en esta clase de amor por lo enganchador que resultó gracias a estos dos.

A su vez le hizo justicia al personaje de Jackson porque aquí tenemos más contexto de su pasado e inclusive familia. Me gustó que terminara las canciones para variar, luchará por salir adelante y tuviese varios números con Gaga. También saber que el propio Cooper compuso algunas de las canciones, no me sorprendería tanto porque de antemano se ha sabido de su fuerte compromiso.

En conclusión, pudiera elogiarla y seguir diciendo maravillas pero estoy seguro que la temporada de premiaciones se encargaran de ello; entretanto me encuentro satisfecho de haber visto esta adaptación porque la disfruté de principio a fin. En cierto modo me enamoré de esta historia y al final, logró dejar su propia huella y vaya que la barra era imposible de alcanzarse.

Calificación: 4½ de 5 estrellas

sábado, 6 de octubre de 2018

Crítica de Venom


Venom (2018) crítica: un bochornoso desastre que tira a la basura ...

Tras explorar futuros habitables planetas, la Fundación Lifeha ha traido consigo cuatro muestras de vida de las cuales una logra acoplarse con el reportero Eddie Brock quien tras traicionar la confianza de su futura esposa y haber destrozado su carrera, recibe esta oportunidad de quizás reivindicarse con un poco de villanía en el camino.

El director Rube Fleischer es reconocido por sus previas adapatciones como Tierra de Zombies y Gangster Squad, por lo que ese tono sarcástico de humor es reconocible aunque a su vez resulta inesperado porque esperaba una historia de horror con más suspenso y sangre gráfica. No obstante, su trabajo contiene cierta calidad en especial en sus secuencias de acción.

La criatura en sí de Venom como el concepto son intrigante y un poco espeluznante al principio, aunque cerca del tercer actor se torna en la típica historia de origen de un superhéroe hasta el grado de compaginar con la familia considerando que las escenas fuertes son sólo indirectas. Ahora entiendo por el rechazo de los fans al no ser fieles a los comics.

Pareciese no existir una dirección en el guión, sino el método se percibe como de improvisación. Todos sin excepción improvisan de acorde a las circunstancia y en sí se mantiene superficial su narrativa hasta incluyendo el desarrollo de personajes. Nadie es tan complejo, ni siquiera el villano como debió haber sido.

Tom Hardy es un talento poderoso y ningún extraño al género tras impresionarnos en El Caballero de la Noche Asciente, su voz como Venom es fenomenal hasta inclusive la química. Son dos identidades realmente opuestas conectadas por su fracaso social y laboral.  Se complementan y nos importa, el detalle aquí fue la ausencia de un conflicto interno.

Lo mismo sucedió con Riz Ahmed, sabemos lo que es y representa pero carecer de complejidad lo hace un villano débil. Irónico considerando la trama se trata de un villano. El actor se defiende con palabras y con su presencia porque si que sabe intimidar. En cuanto a Michelle Williams, podría decirse que divirtió bastante en la filmación lo cual no está mal tampoco.

En definitiva no es una inservible adaptación como sugieren la mayoría, tampoco es el villano que nos prometieron hace diez años; pero de ahí en fuerza creo que es inesperadamente divertida y familiar a pesar de tono oscuro. Le faltó horror y suspenso pero al final del día cumple con su propósito de entretenernos con la fórmula clásica de Marvel.

Si por mi fuese, me hubiera concentrado en el conflicto interno de Eddie y su conversión a la maldad. Una especie de crisis psicótica donde se viese inspirado a convertirse en un autentico villano en manos de los chicos buenos. Un abuso de la justicia o experimentaciones, no sé, sentía que pudo haber dado mucho más pero igual, se vale mantenerse en la zona de conforte aunque en el futuro vaya a depender demasiado del Hombre Araña  como de los otros villanos.

Calificación: 3½ de 5 estrellas.