Entretenida, sangrienta, actuaciones únicas y efectos interesantes, son los elementos que encontramos en este remake del clásico bajo el mismo nombre del año 1941.
A diferencia de la historia original, ésta no se centra en romance y misterio elaborado. Varios elementos y temáticas fueron borradas de la antecesora pero los nombres continuaron fieles. Agregaron una sorpresa la cual uno puede estar intuyéndosela conforme va desarrollándose el trama. El poema se mantuvo al igual que el tema de la licantropia.
La escenografía esta correctamente desarrollada, reflejándote a la época 1892. La iluminación es oscura en la mayoría de los escenarios para subir el suspenso, aunque no es una película que busque asustar a la audiencia sino lucir la acción y los asesinatos del hombre lobo. El escenario de Londres fue fascinante observar su estructura gótica. La Luna la hacen ver resplandeciente y sumamente especial.
El elenco es lo que le da presencia y atracción a esta producción: el ganador de la Academia Benicio del Toro muestra presencia y equilibrio al interpretar al humano y al Hombre Lobo, con heridas del pasado, serio, valiente, frío y reservándose los sentimientos. Anthony Hopkins es lo contrario, extrovertido, misterioso, oscuro y con secretos. Emily Blunt es la belleza, la pieza de amor, pero no fue utilizada en su totalidad, tal vez no quisieron caer en lo típico y por último Hugo Weaving, como el detective es un gran soporte y contribución a la historia, colocado como un antagonista, pero sinceramente no se infiere de esa manera debido a que otro es el protagonista desarrollado de forma misteriosa.
La dirección fue adecuada y los efectos pueden ser considerados desde diferentes puntos de vista, debida a las múltiples adaptaciones del Hombre Lobo en diversos tipos de películas. Tiene realismo, pero puede que haya varios a quienes no les impacte mucho, en otras palabras, son decentes. Las secuencias de asesinatos son terríficas, sesos, cabezas volar, hoyos en el cuerpo, etc. En cuanto al suspenso, estilo clásico anticipándote para un susto que uno ve venir.
Pero concuerdo con algunos críticos que falto mas desarrollo en los personajes y más trabajo en la historia. Incógnitas sobre el amor de Gwen y el pasado del detective. Aún así, es un buen producto, no una obra de arte, pero entretenida y moderna, casi épica, pero sufre criticismo debido a la anterior del 2004, Van Helsing: estilo del pueblo y el hombre del cementerio.
Es recomendable verla para los que les fascinan este tipo de leyendas, como mencioné no es una obra de arte, pero es entretenida y cautivadora. Podría decirse que es la mejor versión hecha actualmente por la estabilidad en historia y actuaciones.
A diferencia de la historia original, ésta no se centra en romance y misterio elaborado. Varios elementos y temáticas fueron borradas de la antecesora pero los nombres continuaron fieles. Agregaron una sorpresa la cual uno puede estar intuyéndosela conforme va desarrollándose el trama. El poema se mantuvo al igual que el tema de la licantropia.
La escenografía esta correctamente desarrollada, reflejándote a la época 1892. La iluminación es oscura en la mayoría de los escenarios para subir el suspenso, aunque no es una película que busque asustar a la audiencia sino lucir la acción y los asesinatos del hombre lobo. El escenario de Londres fue fascinante observar su estructura gótica. La Luna la hacen ver resplandeciente y sumamente especial.
El elenco es lo que le da presencia y atracción a esta producción: el ganador de la Academia Benicio del Toro muestra presencia y equilibrio al interpretar al humano y al Hombre Lobo, con heridas del pasado, serio, valiente, frío y reservándose los sentimientos. Anthony Hopkins es lo contrario, extrovertido, misterioso, oscuro y con secretos. Emily Blunt es la belleza, la pieza de amor, pero no fue utilizada en su totalidad, tal vez no quisieron caer en lo típico y por último Hugo Weaving, como el detective es un gran soporte y contribución a la historia, colocado como un antagonista, pero sinceramente no se infiere de esa manera debido a que otro es el protagonista desarrollado de forma misteriosa.
La dirección fue adecuada y los efectos pueden ser considerados desde diferentes puntos de vista, debida a las múltiples adaptaciones del Hombre Lobo en diversos tipos de películas. Tiene realismo, pero puede que haya varios a quienes no les impacte mucho, en otras palabras, son decentes. Las secuencias de asesinatos son terríficas, sesos, cabezas volar, hoyos en el cuerpo, etc. En cuanto al suspenso, estilo clásico anticipándote para un susto que uno ve venir.
Pero concuerdo con algunos críticos que falto mas desarrollo en los personajes y más trabajo en la historia. Incógnitas sobre el amor de Gwen y el pasado del detective. Aún así, es un buen producto, no una obra de arte, pero entretenida y moderna, casi épica, pero sufre criticismo debido a la anterior del 2004, Van Helsing: estilo del pueblo y el hombre del cementerio.
Es recomendable verla para los que les fascinan este tipo de leyendas, como mencioné no es una obra de arte, pero es entretenida y cautivadora. Podría decirse que es la mejor versión hecha actualmente por la estabilidad en historia y actuaciones.
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